Bailarinxssonorxs es una investigación artística que se pregunta por el “bailarinx” (Qué es? Cómo es? Qué hace? Etc.) desde "el bailarxn". Es decir, desde el “‘bailarinx” que ha sido formado dentro de los estándares de “la Historia de la Danza” y que ha escogido profesionalizarse en esta “especialización”, hasta el “bailarinx” como una persona cualquiera que vivencia el baile y que se relaciona vitalmente con ésto fuera de un “proyecto profesional-económico”.

¿Cómo condiciona la práctica del bailar nuestra cotidianidad existencial? ¿Cómo se vive en el bailar alguien que se ha relacionado de manera académica/profesional con las estructuras "hegemónicas" de la Danza?

¡IMPORTANTE! : Esta investigación es limitada y concreta, debido a que "lxs bailarinxs" a los que se apela estamos enmarcadxs dentro del contexto/fenómeno de "la Historia de la Danza (hegemónica) de la Danza Contemporánea" y sus estructuras académicas y "profesionales".



Ellos, los bailarines. Esos que practican cuerpo. Aquellos que amasan lo pre-conceptual,
que rozan lo ontológico, que usan el directo, lo vivo. Que transcurren en activo… Deberían
empezar a hablar. Deberían empezar a verse más allá de meros objetos lúdicos,
bellos, muy bellos. Deberían empezar a transmitir cómo se vive el conocer a pelo.
Deberían hacerse cargo de su responsabilidad para con el mundo. Deberían entender
que son política. Que son privilegiados. Que son técnica y método. Altamente
especializados. Deberían asumir de una vez por todas, que son pensamiento.


Que han vivido el peso, el tiempo y el espacio. Que saben que el flujo contenido afecta a la
respiración. Que si sueltan un poco el ano y abren la garganta, la mirada cambia. Que lo
vertical difiere de la horizontal. Que con ojos cerrados se siente como un poco más, pero
que en realidad no es más que un falsete, un estado idealizado y que uno pierde el mundo,
y que sin el mundo el bailarín deja de tener sentido. Que los huesos, son el descanso del
músculo, y que con el músculo descansado se amplía el espacio en las articulaciones y que
de esa manera el cuerpo se abre y la mente parece comenzar a bajar al estómago y ser
vísceras.


Si el bailarín comenzase hablar, de cómo es eso de lo encarnado, de cómo es eso de la
acción como pensamiento con el mundo, de cómo se atraviesa y te atraviesa el otro. Si
empezase a usar la biología, eso de ser carne y piel, y la suerte que tiene de no ser un
objeto de madera, papel, hierro o tierra. Si jugase con la ventaja ante los otros que eso
supone. Podría por fin, descansar tranquilo. Porque su existencia comenzaría a tener algo
de sentido. Podría por fin entender que es necesario. Que como su vecino el médico, el
panadero y el barrendero, tiene una tarea vital que ejecutar para con el pueblo.

3. SOMATURGIA:

Mediante este proyecto de investigación en danza, me gustaría abordar la compleja idiosincrasia que se da en las personas que hemos sido educadas desde muy jóvenes en la práctica académica del bailar.

En este proceso me gustaría abordar y desarrollar un “espacio íntimo” conmigo misma que me permita tanto la aceptación y rendición a mi propia estructura introyectada de la Danza, como a la abertura y expresión de todo un enramado de potencias sensibles y trans-individuales que huyen de las lógicas hegemónicas de la Danza ( la escena, la composición, la coreografía, la técnica, la dramaturgia etc.).

Generando una práctica bailada que se base en el diálogo constante entre ambas potencias.

¿Cómo lidiar en directo con las múltiples complejidades estructurales y sensibles que nuestros cuerpos albergan al bailar?

¿Cómo generar un espacio psíquico capaz de abrirse a “lo que hay” sin caer en estructuras de juicio y censura, pero que sea lo suficientemente consciente de su historicidad como para no generar una discursiva de poder?

¿Cómo dialogar entre las múltiples procedencias de nuestros conocimientos corporales?

¿Cómo puedo suspender todo el enramado ideológico y jerárquico de la historia de la Danza sin llegar a rechazarla? ¿Es eso posible?

¿Qué abordaje psico-afectivo y somático de base puede hacer que las estructuras de poder se conviertan en potencias vitales y no en “leyes excluyentes”?

Para esta práctica somatúrgica, me gustaría profundizar en cuatro aspectos del bailar:

1. La espiritualidad y la erótica de la kinestesia en el bailar.
2. Bailar como medio para honrar y agradecer la materialidad existente que “me antecede y
se ofrece entera” (el espacio, los objetos, el “no-yo”).
3. La expresividad-vitalidad de lo trans-personal (lo pre-identitario, el pre-sujeto, lo pre-humanista) en el bailar.
4. La invocación de los fantasmas, huellas, trazos, espíritus y afectos de la propia “Historia
vivida de la Danza”.



bailarinxssonorxs se compone por tres ejes de trabajo:

1. ARQUEOLOGÍA DEL BAILARÍNX
- CONVERSACIONES

2. AUTO-ETNOGRAFÍA:
- TEXTOS

(los resultados de las primeras 2 ramas pueden encontrarse en este blog)

¿Qué es bailarinxssonorxs?